¿Te cuesta trabajo levantarte por la mañana?
Y si te preguntas qué hace que pongas los pies en el suelo,
¿es por el mero hecho de que no hay otra alternativa?
Entonces, deberías probar la meditación en la preciosa existencia humana.
Cada día es valioso porque cada día puedes crecer, practicar el amor, hacerte una persona más
sabia y feliz. Cada día puedes acercarte un poco más a la felicidad que no depende de nada que
pase fuera; a la felicidad que sólo depende de tu mente (o de tu corazón), de la paz interior.
Cada día tienes una vida y sólo una; un milagro difícil de conseguir.
Cada día puedes vivir una vida significativa; cada momento con sentido, y recuerda que cada
momento es la causa del momento que le sigue.
No es un mantra, pero para mí como si lo fuera. Lo leí en alguna parte:
«Cada día, cuando abras los ojos, recuerda que tienes por delante 24
Valiosísimas horas para ser feliz y hacer feliz a los demás».
Cada instante, profundamente vivido con paz y consciencia, la mejor inversión para el instante posterior.
Para todos, incluido Tu. 🙂
¿Oye y si descubrieras que la felicidad es eso que ya tienes?